¿No recibimos todos emails que parecen de nuestro banco, de nuestro seguro o incluso nuestros, pero que son en realidad emails falsos? Debido al modo en que están estructurados los emails, los spammers pueden falsificar la dirección del remitente para enviar este tipo de emails fraudulentos o spam. Aquí es donde entra en juego SPF.
El Sender Policy Framework (SPF) es un sistema de validación que permite a los ISPs y servidores webmail (como Gmail y Yahoo) comprobar si el email entrante ha sido enviado desde un servidor autorizado. Utilizando la dirección IP del servidor de envío y los registros DNS de tu dominio, los ISPs pueden comprobar si el servidor de envío está autorizado. Si el email procede de un remitente no autorizado, se marca como spam.